
Los potajes y guisos con toques marineros siempre apetecen, como es el caso de estos garbanzos con langostinos, muy populares en Andalucía, especialmente en la zona de Cádiz.
Contenido
- 1 ¿Cómo hacer garbanzos con langostinos?
- 2 Información nutricional
- 3 Receta de garbanzos con langostino
- 4 Consejos adicionales
- 5 ¿Es necesario pelar los tomates?
- 6 ¿Qué tipo de garbanzos es mejor usar?
- 7 ¿Puedo usar pimentón picante?
- 8 ¿Cuánto tiempo dura en la nevera?
- 9 Beneficios y propiedades
- 10 ¿Sabías qué?
- 11 Recomendamos
¿Cómo hacer garbanzos con langostinos?
Puedes partir desde cero, cociendo los garbanzos secos remojados y utilizando langostinos frescos sin pelar, o puedes optar por productos semipreparados para mayor comodidad.
Información nutricional
Cada ración de garbanzos con langostinos contiene aproximadamente 350 kcal, 30 g de carbohidratos, 12 g de grasas, 25 g de proteínas, 7 g de fibra, 5 g de azúcares, 130 mg de colesterol y 800 mg de sodio.
Receta de garbanzos con langostino
Preparación: 15 minutos
Cocción: 45 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes
- 400 g de garbanzos cocidos
- 1 cebolla blanca o cebolleta
- 2 dientes de ajo
- 1 cucharadita de pulpa de pimiento
- 1 pimiento verde italiano
- 1 zanahoria
- 3 tomates pera
- 1 cucharada de tomate concentrado
- 1 hoja de laurel
- 50 ml de vino blanco
- 200 ml de caldo de pescado
- Pimentón dulce al gusto
- 3 hebras de azafrán
- 200 g de langostinos crudos
- Aceite de oliva virgen extra
- Sal fina
- Perejil fresco
Preparación
- Si los langostinos no están pelados, límpialos cuidadosamente, separando las cabezas, patas, colas y caparazón. Reserva el marisco y saltea las partes desechadas en una cazuela con un poco de aceite de oliva. Añade agua hasta cubrir dos dedos por encima y cuece durante 20 minutos, presionando ocasionalmente. Colar y reservar el fumet.
- Picar la cebolla, laminar los ajos, trocear el pimiento y pelar y picar la zanahoria. Pelar los tomates o trocearlos enteros si luego se va a colar el sofrito.
- Calentar un fondo de aceite en una cazuela y pochar la cebolla con el ajo, la hoja de laurel y la pulpa de pimiento choricero hasta que empiecen a transparentar. Incorporar el resto de las verduras, el tomate concentrado y una pizca de sal. Sofreír hasta que las hortalizas estén muy tiernas.
- Agregar un poco de caldo o agua, lo justo para poder triturar la mezcla y obtener una crema espesa con la batidora. Si se desea, colar esta preparación y devolver a la cazuela.
- Incorporar los garbanzos escurridos, una pizca de sal, el pimentón y el azafrán. Remover y añadir el vino, dejando que el alcohol se evapore. Añadir caldo hasta obtener la textura deseada y luego incorporar los langostinos crudos. Tapar y cocer a fuego suave unos minutos hasta que el marisco esté cocido. Rectificar y servir: Rectificar de sal y de caldo si es necesario, y servir con perejil picado.
Consejos adicionales
- Preparar un fumet con las cabezas y cáscaras de los langostinos potenciará notablemente el sabor del guiso.
- Para ahorrar tiempo, utiliza garbanzos envasados ya cocidos. Asegúrate de enjuagarlos bien antes para eliminar el exceso de sodio y conservantes.
¿Es necesario pelar los tomates?
No es obligatorio, pero pelarlos evita restos de piel en la textura final. Si prefieres una preparación más rústica, puedes dejarlos con piel.
¿Qué tipo de garbanzos es mejor usar?
Los garbanzos grandes tipo castellano son ideales para guisos. Si usas garbanzos secos, recuerda remojarlos al menos 8 horas antes y cocerlos bien antes de usarlos.
¿Puedo usar pimentón picante?
Claro. Puedes reemplazar parte del pimentón dulce por uno picante para darle un toque más especiado.
¿Cuánto tiempo dura en la nevera?
Conservado en un recipiente hermético, este plato dura entre 3 y 4 días en el refrigerador. Caliéntalo a fuego lento antes de servir.
Beneficios y propiedades
Combinan proteínas de origen vegetal y animal, ideal para una dieta equilibrada. Ayuda a la digestión y promueve la salud intestinal. Aporta vitaminas A, B, C y minerales como hierro, potasio y magnesio.
¿Sabías qué?
Los garbanzos han sido una fuente de alimento básica en la dieta mediterránea durante siglos, siendo apreciados por su valor nutritivo y versatilidad en la cocina.