Los higaditos de pollo encebollados son un plato rico en nutrientes que combina la suavidad del hígado con el dulzor de las cebollas caramelizada en una receta sencilla pero deliciosa es perfecta para incorporar vísceras de forma apetecible a nuestra dieta.
Contenido
¿Cómo hacer higaditos de pollo?
La clave de este plato está en la cocción correcta de los higaditos para que queden tiernos y jugosos, evitando que se resequen acompañados de cebollas se cocinan lentamente hasta caramelizarse, aportando un dulzor natural.
Información nutricional
Cada ración de higaditos de pollo encebollados contiene aproximadamente 220 kcal, 20 g de proteínas, 10 g de grasas (2 g saturadas), 350 mg de colesterol, 12 g de carbohidratos, 5 g de azúcares y 120 mg de sodio.
Receta de higaditos de pollo encebollados
Preparación:15 minutos
Cocción: 25 minutos
Raciones: 4 personas
Ingredientes
- 500 g de higados de pollo
- 3 cebollas grandes
- 4 dientes de ajo
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- 1 cucharada de vinagre de jerez
- 1 hoja de laurel
- 1 pizca de tomillo
- 1 chorrito de vino blanco
- Perejil fresco picado
- Sal
- Pimienta
Preparación
- Comenzamos limpiando los higaditos cuidadosamente, eliminando cualquier nervio o parte dura. Cortamos las cebollas en juliana fina y picamos los ajos.
- En una sartén amplia, calentamos el aceite y sofreímos la cebolla a fuego medio-bajo con la hoja de laurel hasta que esté dorada y caramelizada, aproximadamente 15 minutos.
- Añadimos el ajo y cocinamos unos minutos más. Retiramos las cebollas y, en la misma sartén a fuego alto, salteamos los higaditos previamente sazonados hasta que estén dorados por fuera pero jugosos por dentro, unos 3 a 4 minutos por lado.
- Incorporamos las cebollas de vuelta, agregamos el vinagre y el vino si se desea, dejamos reducir brevemente y espolvoreamos con perejil fresco antes de servir.
Historia y origen
Este plato tiene raíces en la cocina tradicional española y se ha adaptado en diferentes países de Latinoamérica ya que históricamente las vísceras formaban parte importante de la dieta por su alto valor nutricional y bajo costo, siendo un plato común en la cocina de aprovechamiento.
¿Sabías qué?
El hígado de pollo contiene más vitamina B12 que cualquier otro alimento comúnmente consumido, superando incluso a la carne roja, proporcionando más del 100% de las necesidades diarias de vitamina B12 y hierro.