Los buñuelos de viento son unas bolitas de masa frita típica de la celebración de Todos los Santos y que durante su proceso de cocción llegar a doblar, formando un interior lleno de aire del cual se deriva su nombre.
Contenido
¿Cómo hacer buñuelos de viento?
Uno de los secretos de su elaboración está en utilizar una temperatura del aceite que alcance los 170°C (338°F), ya que si el aceite está muy frío, los buñuelos no flotarán y si el aceite está demasiado caliente, los buñuelos formarán una costra dura en el exterior y no crecerán.
Información nutricional
Cada ración de buñuelos de viento contiene aproximadamente 220 kcal, 25 g de carbohidratos, 12 g de grasas, 4 g de proteínas, 1 g de fibra, 8 g de azúcares, 60 mg de colesterol y 150 mg de sodio.
Receta de buñuelos de viento caseros
Preparación: 2 horas 15 minutos
Cocción: 20 minutos
Raciones: 6 personas
Ingredientes
- 250 ml de agua
- 125 g de harina
- 30 g de mantequilla
- 40 g de azúcar
- 4 huevos
- 1 cucharadita de azúcar de vainilla
- 1 cucharada de ralladura de limón
- ¼ de cucharadita de sal
- Aceite para freír (oliva o girasol)
- Azúcar
Preparación
- En un cazo mediano añadir el agua, el azúcar, el azúcar de vainilla, la ralladura de limón y la sal, calentar a fuego medio-alto hasta alcanzar el hervor, bajar el fuego, añadir la harina cernida, toda junta y revolver con una cuchara de madera para integrar hasta obtener una masa que no se pegue en las paredes del cazo.
- Retirar el caso del fuego e inmediatamente incorporar los huevos, uno a uno, integrando por completo cada vez antes de añadir el siguiente, cubrir con un paño limpio y reposar por unas 2 horas.
- En una sartén grande o freidora añadir abundante aceite para freír hasta rellenar unos 4 centímetros de altura y calentar a fuego medio hasta alcanzar 170°C (338°F), disponer de dos cucharaditas de café pequeñas, sumergir en aceite, formar pequeñas bolitas de masa y sumergirlas en el aceite caliente, con suficiente espacio entre ellas, freír hasta que estén bien doradas y su tamaño se haya incrementado, unos 2 a 3 minutos. Retirar con una espumadera, reservar en una fuente con papel absorbente Repetir con toda la masa y finalmente espolvorear con azúcar.
- Servir los buñuelos de viento templados o fríos, opcionalmente rellenar con crema o mermelada de fruta en una bandeja como centro de mesa o en copas individuales.
Cómo consumir buñuelos de viento
Los buñuelos de viento habitualmente se consumen solos, recién elaborados, aunque también suelen ser rellenos con crema, chocolate, chantillí o mermeladas, creando deliciosas combinaciones.
¿Sabías qué?
El origen de los buñuelos es difuso, pero se cree que se hicieron populares en la antigua Roma, donde se conocían como «globuli».